
Seguir a Jesús implica una decisión radical, no se trata de aceptar una buena religión o filosofía, se trata de una nueva manera de vivir. Mi egoísmo es dejado de lado junto con todos mis deseos y ambiciones personales con el único propósito de vivir para Dios. Este pasaje que leímos es clave, te pido que medites en él una y otra vez ya que Jesús nos está señalando el camino que debemos elegir.
Dice el verso 34 "Porque el que quiera salvar su vida, la perderá; pero el que pierda su vida por mi causa y por el evangelio, la salvará." Observemos que seguir a Jesús implica rendir mi vida a él, pero la otra opción que tenemos es no seguirlo porque quiero vivir a mi manera, pero con esta opción en realidad nos estamos engañando porque si queremos salvar nuestras vidas, a nuestra manera, la perderemos, pero si perdemos nuestras vidas por causa de Jesús, osea rendimos nuestra voluntad a Dios y vivimos para él, entonces nos salvaremos. Jesús dijo en otra oportunidad "...yo he venido para que tengan vida, y la tengan en abundancia." (Jn. 10:10) Decidir seguir a Jesús es decidir por la verdadera vida que tiene un propósito eterno. Claro que como todo lo nuevo habrá mucho por aprender, conocer, descubrir...
Tenemos dos opciones: seguir a Jesús o no hacerlo, y cada decisión tiene sus consecuencias ¿Cuál camino elegiremos?
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