
Marcos 12:13-17
Nuevamente buscan a Jesús para hacerlo tropezar, fariseos y herodianos creen tener la pregunta con la cual acusar a Jesús y arrestarlo. Le preguntaron ¿está permitido pagar impuestos al César o no? Una vez más el Señor nos sorprende con su respuesta, el verso 17 resalta "y se quedaron admirados de él". Se acercaban creyendo ser los mejores pero se iban admirando a Jesús.
Es sorprendente notar como el Señor aprovechaba cada situación para enseñar principios del reino, hasta momentos que parecían adversos fueron utilizados para enseñar. ¿cómo lo hacía? Pues él dependía del Padre, caminaba en el Espíritu, sus largas horas de oración se reflejaban en su diario vivir. Pero en éste día quiero detenerme en el verso 17. Jesús dijo "denle, pues, al césar lo que es del césar, y a Dios lo que es de Dios." Claro está que Jesús hablaba de algo mas importante que el tributo. Podríamos decir que césar representaba todo el sistema de gobierno al cual se sujetaba el pueblo, él tenia la autoridad de perdonar algún crimen cometido y de quitar la vida, él era la persona que todos debían servir y obedecer. ¿En nuestros tiempos quien representaría césar? ¿en tú vida a quién llamarías césar? Quizás identifiques aquello que te quita el sueño, aquello que te preocupa, pero que pertenece al sistema mundo. Pero como hijo de Dios, nuestra soberanía es celestial, nuestro Rey y Señor es Jesús y a él le debemos nuestras vidas.
Cada día que pasa ¿a quién dedico más tiempo? ¿a quién le rindo mi vida? ¿quién ocupa el primer lugar en mi corazón? ¿el sistema mundo o el reino de Dios? No tenemos que dejar de trabajar, ni de estudiar, etc. sino que en todo aquello que le dedico tiempo debo recordar que mi rey es el Señor y que vivo bajo su autoridad y gobierno y me debo esforzar por vivir bajo sus principios y no bajo los principios del césar.
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