1º Juan 2:12-14
¿Recuerdas cuando hiciste algún viaje en el que pasaste mucho tiempo lejos de lo que amabas; o cuando un familiar se alejó por algún motivo? ¿Pudiste notar lo reconfortante que es recordar, en esos momentos que estas lejos, los lindos momentos vividos; recordar que pronto volverás; imaginarte que pronto la distancia se acabará y volverás al lugar que amas y con la persona que amas?.
Este ejercicio mental tiene un gran efecto en nuestras vidas, tanto positiva como negativamente, ya que si solo piensas en lo malo esa será tu forma de ver la vida.
Ayer vimos la importancia de perdonar. Dice el verso 11
"pero el que odia a su hermano está en la oscuridad y en ella vive, y no sabe a dónde va porque la oscuridad no lo deja ver"
Si alimentamos el odio, el rencor, y no perdonamos, permaneceremos en la oscuridad y no podremos ver el camino que Dios quiere que transitemos. En este contexto Juan continúa escribiendo recordándonos los motivos por lo que escribe. Si nos encontramos en la oscuridad, recordemos que nuestros pecados fueron perdonados por la obra de Jesús en la cruz (verso 12).
Cuando te sientas abatido por el pecado, cuando pases por momentos de soledad, cuando te veas lejos del amor del Padre, recuerda que Jesús pensó en ti, en cada uno de nosotros y nos amo hasta el fin. Ya sea que conozcas a Jesús hace mucho tiempo, o que seas un joven en la fe, todos tenemos el gran privilegio de relacionarnos con Dios y de conocerle un poco mas cada día.
"les escribo... porque son fuertes... porque han vencido al maligno"
El Señor nos dio la victoria. Su poder para enfrentar las luchas cotidianas de la vida, siempre estará disponible.
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