
Colosenses 4:7-9
Vivimos en la era de la comunicación, nunca antes tuvimos tantas posibilidades de estar conectados. No importa las distancias, tampoco los horarios, la tecnología que está a nuestro alcance acorta toda distancia y tiempos. Por ejemplo yo estoy escribiendo en un lugar y tu estas leyendo en otro.
El apóstol Pablo escribió esta carta estando preso en Roma, y la envía con Tíquico y Onésimo. Ellos no contaban con nuestra tecnología pero se las arreglaban muy bien. Contaban con hombres fieles que estaban dispuestos a realizar largos viajes para entregar una carta. Gracias a estos hombres Pablo podía seguir ministrando a las iglesias a pesar de las distancias, y también podía sentirse acompañado en el ministerio al recibir noticias y hasta provisiones en muchos casos.
Como comentamos al principio, vivimos en la era de la comunicación pero creo que Pablo tenía más contacto con los hermanos de las distintas iglesias que nosotros. ¿Cuántos misioneros conoces? ¿Con cuántos mantienes un contacto fluido? ¿Conoces como viven, que necesidades tienen? ¿Cómo estás usando la tecnología que tenes a tu alcance?
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